El corazon

 

Más de 50 personas mueren a diario en Francia de un infarto causado por el tabaquismo. El tabaco es directamente responsable de la mitad de los infartos del miocardio, que son 25.000 al año en Francia…

La nicotina incrementa el ritmo cardíaco entre 10 y 20 latidos por minuto (más de 20.000 latidos suplementarios al día) y son necesarios varios días sin fumar para que el corazón recupere su ritmo normal.

El óxido de carbono sustituye al oxígeno y aumenta el riesgo de que se formen coágulos sanguineos. Provoca también lesiones que contribuyen a endurecer y a estrechar las arterias; es decir: arteriosclerosis. «Las arterias se vuelven como tubos de radiador llenos de incrustaciones y se obstruyen» * 
Mientras se fuma, por tanto, el corazón late más, al mismo tiempo que las arterias engrosadas le proporcionan menos sangre y disminuye el abastecimiento de oxígeno. Más esfuerzo, menos aire. 

Hasta el día que el corazón se ahoga, denominado: crisis cardíaca, que es mortal si la arteria que alimenta el corazón (coronaria) está demasiado obstruida.
«La práctica hospitalaria demuestra a diario que no es extraño que un sujeto de menos de cuarenta años, aquejado de un infarto del miocardio, tenga como único factor de riesgo del accidente cardíaco el tabaquismo.“ **

Finalmente aparece el enfisema: las paredes de los alvéolos pulmonares se endurecen y se fragmentan uno a uno. Y los alvéolos pulmonares nunca se regeneran: es la asfixia lenta, hasta la muerte, cuando se contrae una gripe u otra infección benigna.

*Doctor Delbecque, secretario de la Fundación Regional de Cardiología en Dunkerque, durante un debate en Lille comentado en La voix du Nord del 5 de noviembre de 1976.

**Profesor Jean-Philippe Metzger, cardiólogo en el Hospital Necker en París.